F.B.BONARES INFANTIL, POCA RECOMPENSA PARA TANTO TRABAJO

El fútbol de base son etapas, cada una con sus dificultades, con sus características, algunas son más gratificantes y en otras el trabajo es menos recompensado. Pero de entre todas las etapas, sin duda, la más complicada es el paso del fútbol 7 al fútbol 11, paso que corresponde a la categoría infantil, que precisamente es la que llevo esta temporada.

La temporada pasada tuve que formar un equipo con un grupo de chavalines que llevaban desde el comienzo cambiando de entrenador, casi siempre debutantes, y la verdad es que el grupo necesitaba que se le metiera carácter competitivo y eso fue lo que hice, nos costó al principio, pero luego el equipo funcionó maravillosamente y terminamos la competición con unos 150 goles a favor y ganando la mayoría de los partidos, con un rendimiento particular de los chavalines a un nivel muy alto.

Desde el club se pensó que para el grupo era positivo que siguiera mi trabajo con ellos, y a mí también me apetecía, me motivaba. Y básicamente porque independientemente del nivel futbolístico del grupo, (que es bueno), estos chavales tienen un valor humano enorme, me siento bastante cómodo con ellos, merecen bastante la pena.

Por mi experiencia sabía que este año iba a ser complicado ya que a las dificultades del paso del fútbol 7 al fútbol 11 hay que sumar que para nosotros es aún más complicado, ya que seguimos entrenando en campo pequeño con lo cual en los partidos se encuentran demasiado "perdidos", no saben medir las distancias y hasta que se hagan tiene que pasar un tiempo, tiempo que sería bastante más corto si entrenáramos en campo grande, pero bueno, es algo que sabíamos y asumimos.

Está siendo complicado competir, es la verdad, tenemos muchas dificultades para poder plantar cara a los equipos rivales, el calendario tampoco nos ayuda, y encima jugamos todos los partidos fuera de casa, demasiados obstáculos. Eso hace que en ciertos momentos podamos, todos, venirnos un poco abajo y desanimarnos, somos humanos.

Hasta ahora aún no hemos ganado ni un sólo partido, pero os invito a todos a ver al equipo entrenar, como trabajan, como se esfuerzan, estamos dando lo mejor de nosotros para revertir la situación, y lo hablamos cada día, el fútbol nos va a devolver multiplicado por cien todo lo que estamos trabajando, cualquier equipo en esta situación sería ya un desastre entrenando y estos chavalines se machacan en cada entrenamiento, sólo con eso, me siento super orgulloso de ellos.

En fútbol los resultados condicionan mucho, evidentemente cuando un equipo no gana, sea del nivel que sea, el ambiente que rodea se enturbia un poco, salen a relucir cosas, problemas, detalles que cuando se ganan los partidos se olvidan, y ningún entrenador del mundo se libra de las críticas cuando los resultados no son buenos, por eso entiendo que puedan haber críticas y las acepto como parte del juego.

En cada charla que les doy a los niños les digo que estamos sembrando para luego recojer, y este trabajo va a servir para poner los cimientos de un equipazo en el que nos vamos a convertir más pronto que tarde, volverán los buenos resultados, el buen juego, y entonces me sentiré exactamente igual de orgulloso de ellos que ahora, no más.