DISPARATE NACIONAL

Desde luego que uno sigue las noticias día a día y no puede salir de la incredulidad, cómo es posible que todo lo que salga de este gobierno que tenemos sean buenas noticias, "brotes verdes", fin de la recesión, principio de la recuperación y cosas por el estilo, cuando la realidad en la calle es crítica todos los días nos enteramos de gente de nuestro círculo que se quedan en el paro, en las empresas que trabajamos se nota el desastre en que se encuentra nuestra economía, o nos toman por tontos, o no se entiende nada.

Parece ser que desde el partido socialista se están empezando a dar cuenta que el primer paso para poder intentar sacarnos del atolladero es quitar al actual presidente, y ya se escuchan voces que piden un cambio y que no vuelva a presentarse, han abierto un debate interno que veremos a ver si tiene éxito.

Primero niegan la crisis, cuando la aceptan resulta que estamos metidos hasta el cuello y mucho más enfangados que el resto de Europa, somos los primeros en anunciar que el fin está cerca, cuando todos los organismos internacionales dicen lo contrario, que seremos los últimos, cada previsión que hacen se queda muy corta.

Una vez aceptada la crisis, (que remedio y con todo el dolor de su corazón), piensan que es pasajera, es mundial decían, que sin hacer nada saldremos adelante, pero cuando ven que sin hacer nada no se sale empiezan a tomar medidas y es peor el remedio que la enfermedad, un disparate tras otro.

Los sindicatos por su lado se manifiestan en contra de los empresarios, inaudito, espoleados por un gobierno que no se le ocurre otra cosa que echar de la mesa de negociación social a los empresarios, es decir, a los que crean los puestos de trabajo, en un acto de irresponsabilidad nunca antes visto, además dentro de las medidas que toman para atajar la sangría de la crisis ni una sóla va encaminada a salvar las miles de pequeñas y medianas empresas (que son el principal creador de empleo), de la ruina.

Este gobierno tan singular tiene la habilidad de crear problemas donde no los hay, o de tenernos entretenidos en disputas por temas como los crucifijos en las escuelas, o en facilitarle a las jóvenes medios para que puedan abortar sin problemas y el sumun es meternos en luchas territoriales, cuando todo el mundo habla de globalidad, nosotros lo contrario.

Otra cosa que me encanta de quienes nos gobiernan es que pregonan a viva voz que son los reyes de las libertades, "defender la alegría" dicen, pero luego en la realidad es que están prohibiéndolo todo, desde fumar hasta hacer botellón, los toros y hasta los chiringuitos de playa.

Lo peor es que todavía nos quedan dos años que aguantarlos, y no hay que ser un lumbrera para darse cuenta que con ellos en el poder es absolutamente imposible que remontemos el vuelo, ahora mismo todo es susceptible de empeorar, cada vez más parados, llegará un momento que se les termine los subsidios y qué pasará, o que se le termine al estado el dinero y se tengan que recortar sí o sí algunas prestaciones imprescindibles.

En mi modesta opinión uno de los pilares en los que se basa la economía es la confianza; de los inversores con capital, de los bancos e incluso de los consumidores; es decir, cuando vamos a gastar o invertir dinero necesitamos estar seguros de lo que vamos a hacer, tener un mínimo de seguridad que no se va a perder nuestro dinero, y con el gobierno que tenemos y teniendo en cuenta los parámetros en los que se mueve, lo que menos despiertan es confianza, no me extrañaría nada que termináramos como en Argentina, con las cacerolas en la calle y haciéndo colas en los bancos para ver si nos dan algo de nuestro dinero.