El lunes recibo una llamada al móvil, me comunican que uno de los directivos del Fútbol Base Bonares se va, lo deja, nos deja.
Desde ese mismo momento he pensado en varias ocasiones en ello, entendiendo que es una decisión personal, uno intenta buscar una justificación, un motivo de peso que provoque el que una persona con tanta implicación en algo corte de raiz con ello y la verdad es que me cuesta encontrar ese motivo, en otros casos la cosa se va viendo venir, pero en este caso no ha sido así, incluso teníamos pendiente alguna que otra conversación para nuevos proyectos.
En estos días en los que he pensado en ello se me han venido a la memoria infinidad de anécdotas, de momentos, de vivencias, de reuniones maratonianas de viernes por la noche, de viajes, de actividades en las que hemos estado todos estos años, muchos, codo con codo peleando por esto.
También han habido momentos menos buenos, claro que sí, discusiones, puntos de vista encontrados, pero eso lejos de abrir una brecha entre nosotros lo que hizo fue ir uniéndonos a todos mucho más.
Realmente pienso que nadie en esta vida es imprescindible, (aunque algunos si se crean), y que como dice el refrán "a rey muerto, rey puesto", pero no por ello puedo evitar lamentar el que uno de los nuestros lo deje, será raro verle separado de todo este mundillo, pero como decisión suya que es tenemos que respetarla.
Como dice la canción "ya nada volverá a ser como antes...", y es que con esta persona se va una parte muy importante de la idiosincracia de nuestro club, con sus errores,(muchos), y sus virtudes, (bastantes más), sencillamente va a dejar huella, primero en la estructura del club, y después en el corazón y la memoria de los que, como he dicho anteriormente, lo consideramos algo más que un simple compañero de junta.
Creo que los cientos de chavalines bonariegos que han jugado a fútbol todos estos años están en deuda con él, les ha dedicado miles de horas, de trabajo sordo, de un día trás otro en la sombra, con una incansable vitalidad y una dedicación en cuerpo y alma.
No se si la decisión será definitiva, aunque lo supongo, pero estas líneas me salen desde dentro, y con ellas tan sólo quiero expresar mis sentimientos y los de otras personas ante esta marcha tan inesperada y aún a riesgo de meter la pata y pecar por adelantado, no me he querido aguantar de escribirlas.
Desde ese mismo momento he pensado en varias ocasiones en ello, entendiendo que es una decisión personal, uno intenta buscar una justificación, un motivo de peso que provoque el que una persona con tanta implicación en algo corte de raiz con ello y la verdad es que me cuesta encontrar ese motivo, en otros casos la cosa se va viendo venir, pero en este caso no ha sido así, incluso teníamos pendiente alguna que otra conversación para nuevos proyectos.
En estos días en los que he pensado en ello se me han venido a la memoria infinidad de anécdotas, de momentos, de vivencias, de reuniones maratonianas de viernes por la noche, de viajes, de actividades en las que hemos estado todos estos años, muchos, codo con codo peleando por esto.
También han habido momentos menos buenos, claro que sí, discusiones, puntos de vista encontrados, pero eso lejos de abrir una brecha entre nosotros lo que hizo fue ir uniéndonos a todos mucho más.
Realmente pienso que nadie en esta vida es imprescindible, (aunque algunos si se crean), y que como dice el refrán "a rey muerto, rey puesto", pero no por ello puedo evitar lamentar el que uno de los nuestros lo deje, será raro verle separado de todo este mundillo, pero como decisión suya que es tenemos que respetarla.
Como dice la canción "ya nada volverá a ser como antes...", y es que con esta persona se va una parte muy importante de la idiosincracia de nuestro club, con sus errores,(muchos), y sus virtudes, (bastantes más), sencillamente va a dejar huella, primero en la estructura del club, y después en el corazón y la memoria de los que, como he dicho anteriormente, lo consideramos algo más que un simple compañero de junta.
Creo que los cientos de chavalines bonariegos que han jugado a fútbol todos estos años están en deuda con él, les ha dedicado miles de horas, de trabajo sordo, de un día trás otro en la sombra, con una incansable vitalidad y una dedicación en cuerpo y alma.
No se si la decisión será definitiva, aunque lo supongo, pero estas líneas me salen desde dentro, y con ellas tan sólo quiero expresar mis sentimientos y los de otras personas ante esta marcha tan inesperada y aún a riesgo de meter la pata y pecar por adelantado, no me he querido aguantar de escribirlas.
3 comentarios:
A ver si dices de quien estamos hablando, porque si no, me quedo igual.....
¿Manolo Coronel?
Permiteme que me lo guarde hasta que esté confirmado.
Una pena que se vaya, una persona que se ha dedicado en cuerpo y alma a trabajar por y para la escuela de futbol. Te vamos a hechar de menos desde dentro del club.
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