Uno de los temas más candentes de la actualidad política nacional es la posible compra de acciones de Repsol por parte de la compañía rusa Lukoil, y eso ha dado pié a que se de la curiosa circunstancia de que los dos principales partidos políticos "traicionen" sus principios y cada uno defienda una postura radicalmente opuesta a lo que defienden normalmente.
Más allá de entrar a valorar la conveniencia o no de dejar entrar a esa compañía en una de las mayores empresas españolas, lo que sí me ha llamado la atención es que el PSOE defiende en este caso el liberalismo, que sea la propia empresa la que decida si permite la venta o no, y el PP insiste en un intervencionismo del gobierno en el asunto, es decir, el mundo al revés.
Es un ejemplo más que me reafirma lo que en otras entradas de este blog he manifestado, que las líneas ideológicas son cada vez más cercanas, que en una sociedad como la que vivimos las posturas radicalizadas tienen poco futuro y los dos grandes partidos intentan acercarse a unas políticas de centro desde la que poder englobar todos los sectores de la sociedad.
Circunstancias paradójicas de personas con un estatus social que no encaja con sus ideas políticas las vemos todos los días, evidentemente ni el PSOE es un partido que defienda exclusivamente a los trabajadores, ni el PP mira sólo por las empresas, hay muchos empresarios con ideas políticas de izquierdas, y también hay muchos trabajadores que se identifican más con las ideas que defiende el Partido Popular.
Por todo ello los mensajes que nos lanzan los partidos políticos, sobre todo en épocas de elecciones, debemos saber leerlos y entenderlos, y no cometer el tremendo error de meter a todo el mundo en el mismo saco, por supuesto que no todos los miembros de los partidos son iguales, es más, estoy convencido que mientras más pluralidad exista dentro de los partidos mucho mejor.
Creo que los estadounidenses nos llevan mucha ventaja en todo esto, ellos tan sólo rivalizan politicamente en épocas de elecciones, luego van todos a una y los votantes no están hipotecados de antemano como sucede aquí, su mentalidad es decidir su voto según los programas, según los candidatos, no soy muy defensor de lo americano, pero en ese tema hay que reconocer que están muy aventajados sobre nosotros.
3 comentarios:
Hay un cierto paralelismo con el tema del oleoducto. El PSOE defiende a un empresario multimillonario que pretende construir una refinería de interior, lo que contradice su polícia medioambiental. Y el PP está en la plataforma junto con los Ecologistas e IU en contra del Oleoducto. Son tácticas de gobierno y oposición.
De todas formas en el caso concreto de Lukoil creo que el PP es coherente porque la empresa rusa no se rige exactamente por el libre mercado, ya que todos los analistas económicos apuntan que la mafia rusa está detras de su dirección.
Aunque discrepo en casi todo lo que dice me parece un blog muy interesante y lo sigo.
Un saludo desde Valverde.
Muchas gracias por su comentario, lo tomaré como un halago.
Y sí, quizás sea cierto que como ejemplo de la idea que pretendo transmitir en esta entrada hubiese sido más adecuado el tema del oleoducto, pero bueno, creo que he dejado clara la idea principal que es que en el fondo no somos tan distintos unos de otros.
Por cierto, me parece perfecto que discrepe de mis comentarios, evidentemente casi todos estan sujetos a un prisma de subjetividad, eso hay que tenerlo en cuenta.
Un saludo.
También, hoy en publico.es
"La Iglesia gana más con Zapatero".
Mucha Santa Maravillas, mucho crucifijos, pero la realidad es la realidad. Sólo actúan laicamente en los asuntos que se ven.
Buen artículo Manolo
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