LA PINZA E INTERNET

Bueno, pues parece que se está calentando la cosa por las distintas páginas bonariegas, y aquellos que quieren apagar el fuego lo que consiguen es un efecto rebote y se reaviva la polémica.

Evidentemente no voy a entrar a valorar las reflexiones de unos y de otros, allá cada cual con sus problemas y sus historias, cada uno en su espacio expresa su opinión con total libertad y no por ello debemos molestarnos, estamos en un estado de derecho donde la libertad de expresión debe imperar siempre.

Desde hace algún tiempo en los comentarios que los lectores de los blogs y webs bonariegas hacen acerca de temas de actualidad se viene produciendo un "ataque", o una fuerte crítica al alcalde de Bonares.

Entiendo que él mismo pueda sentirse dolido, es lógico y humanamente comprensible, no debe ser muy agradable para nadie tener una crítica tan feroz una vez sí y la otra también, y aunque todos los que formamos parte de forma activa en el panorama político local estamos expuestos a recibir críticas, cuando vienen desde un medio como internet que te da la posibilidad del anonimato, esas críticas se hacen sin ningún freno, sin límite y sin pensar en las consecuencias.

Hasta ahí todo es entendible, lo que no lo es porque me niego a hacerlo es pensar que todas esas críticas vienen de personas cercanas al PP o al PA, es otra vez lo mismo de siempre, culpándonos se justifica todo.

En la época preelectoral cuando el foro de Bonares.Org estaba en pleno apogeo, había de todo, gente que criticaba al PSOE y gente que lo defendía, había quién atacaba a Santi Ponce, (muchos), y quién hacía comentarios ofensivos sobre Juan Coronel o Juan Antonio García (otros tanto), las opiniones estaban divididas

Pero es que en éstos momentos la mayoría de los comentarios van en un único sentido, eso nos tiene descolocados a casi todos, una de dos, o los defensores del partido gobernante cayan por dejadez, (con lo cual como dice el refrán, quién calla otorga), o bien han cambiado su postura, porque lo que sí tengo claro es que la misma gente que entraba en Bonares.Org sigue entrando en las páginas actuales.

Sea como fuere pienso que los comentarios y opiniones que se vierten en internet no son un fiel reflejo de la realidad de la calle, por fuera no se palpa ese ambiente tan crispado como se comenta por aquí, eso es lo que veo y así lo digo.

Pero también habrá que decir que tampoco creo que sean tres o cuatro, los mismos siempre, los que escriban, ni lo uno ni lo otro, está claro que hay un sector de población molesto, quizás no al nivel que se reflejan en los comentarios, pero lo que tampoco es cierto es que Bonares sea al día de hoy una balsa de aceite y estemos en el país de las maravillas.

Tampoco debemos restarle importancia, incluso cuando los comentarios en Bonares-Actual sobre el concejal Felipe Martínez, obligaron a este a dar su versión y desmentirlo todo en el último pleno de 2.008, (en aquel tema también manifesté mi incredulidad), digo yo que si estuviéramos tan seguros de que son tres o cuatro no haría falta desmentir nada, casi ni se le haría caso.

Y luego viene lo de la pinza, esa historia de conspiración al más puro estilo novelesco que se han inventado y que tan buen resultado dió y parece que quieren que siga dando, y eso es totalmente falso, la única relación que hay entre nosotros y el Partido Andalucista es que los dos estamos en la oposición, pero cada uno con unas ideas distintas, muy distintas diría yo, y en el tiempo que llevo en esto y hasta el día de hoy puedo asegurar que de acercamiento no ha habido absolutamente nada, que las relaciones son buenas está claro, ¿porqué no han de serlas?, pero tenemos visiones distintas, aunque coincidamos en muchas de las críticas al equipo de gobierno.

Igualmente es injusto e incluso malvado el tomar siempre como lema el "o conmigo o contra el pueblo", es perfectamente lícito que pensemos distintos al equipo de gobierno, que critiquemos lo que creemos que no está bien hecho, que planteemos alternativas, eso no quiere decir que vayamos en contra del progreso del pueblo, si por algo nos estamos caracterizando en esta legislatura es en ser inconformistas y en revelarnos a todo lo que no vemos bien, aún a sabiendas que luego tenemos que aguantar el chaparrón de las criticas, así lo hicimos desde el minuto uno con el pleno de investidura y así lo haremos hasta el último día, y lo más cómodo es decir a todo "si wana", pero cuando pasen los cuatro años me iré a mi casa con la conciencia muy tranquila de que he hecho lo que he podido y no me he doblegado al qué dirán ni me he vendido por un puñado de votos, y es que parto con la ventaja de que, por suerte o por desgracia, no vivo de esto.