sábado, 28 de marzo de 2009

MARTA DEL CASTILLO

Llevamos más de dos meses con el corazón encogido por el caso de esta chica que ha tenido la "mala suerte" de tener como amigos a unos indeseables que están demostrando una crueldad y frialdad que tiene descolocados al más experto de los policías.

Resulta increible como tres "niñatos" traen de cabeza a todo un país que asiste atónito a constantes contradicciones, constantes giros y desmentidos que hacen que vayan ganando tiempo un tiempo que juega a su favor y que puede hacer que las condenas sean mínimas.

El sufrimiento de esa familia no es cuantificable, si por un momento nos ponemos en el lugar de ese padre y esa madre nos entra un escalofrío por el cuerpo que mejor ni pensar que podemos ser nosotros mismos los que sufriéramos algo parecido.

El presunto asesino hoy por hoy vale más por lo que calla que por lo que ha contado, esa es la sospecha del padre de Marta y viendo que ha acertado en todas y cada una de sus sospechas casi damos por supuesto que ahora también lleva razón y hay más personas implicadas en la muerte de esta niña.

Normalmente cuando pasa algo como esto solemos activar nuestro mecanismo de defensa y pensamos que eso a nosotros no nos pasa, que ese tipo de asesinos están en otras ciudades, en otros lugares y nosotros estamos a salvo, pero es que en este caso lo verdaderamente cruel es que los que han propinado tal sufrimiento a la víctima han sido sus propios amigos, tres chavales como cualquier otro, algo que nos deja descolocados y nos deja indefensos totalmente, que les podemos decir a nuestros hijos, ¿que no hagan amigos?.

Evidentemente este es un caso aislado, si no, esto sería de locos, pero la perdida total de valores de gran parte de los chavales de hoy es algo realmente preocupante, el rumbo que están tomando las cosas es para todos los que somos padres y madres un trago muy duro que hay que pasar, viendo tal y como está la sociedad un padre y una madre de un niño o una niña adolescente que empieza a salir de noche lo tienen que pasar muy mal y cuando sale un caso como este aún más, alguno habrá por ahí que hasta que su hijo o hija entra en casa no se duerme.

El caso de Marta ha abierto de nuevo el debate de la cadena perpetua, con la que podemos estar de acuerdo o no, pero lo verdaderamente cierto es que los españoles no creemos en la justicia de este país, los beneficios penitenciarios, los resquicios legales, todo parece destinado a paliar las condenas, todo parece preparado para que quién cometa un delito pague lo mínimo posible y así es mucho más fácil delinquir.

No sé si la solución es la cadena perpetua, pero de lo que sí estoy convencido es que la sociedad debe ser consciente que los delitos no salen gratis y que después de cometer uno hay que pagarlo hasta el último día y las leyes van a ir todas en tu contra, hay que luchar por el cumplimiento íntegro de las penas, por establecer unos criterios muy claros de beneficios penitenciarios, el sistema debe ser mucho más fuerte, y no dar esta imagen de "cachondeo" que cuando pasa un caso como el de Marta nos deja una sensación de impotencia brutal.

Mientras nosotros estamos desde la barrera discutiendo esto, una familia sigue sufriendo y unos asesinos mareando la perdiz, lo dicho, unos indeseables.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo contigo Manolo, este pais hoy por hoy es el paraiso para los delincuentes, no creo que haya muchos paises con un sistema penal tan ridículo, lo que hace no solo que salgan casi de rositas los delincuentes sino que ello provoca que cada vez actuen aquí más bandas internacionales sabiendo que aunque los cojan no les va "pasar nada".