El equipo cadete del C.D.F.B.Bonares cerró la temporada en cuanto a partidos en casa se refiere con una derrota demasiada abultada frente al Hinojos, un muy buen equipo que vino a Bonares a jugarse practicamente la vida, ya que están en plena lucha para ganar el campeonato.
Sabíamos perfectamente como jugarle a este equipo, sabíamos que podían estar un poco nerviosos por lo que se jugaban, sabíamos de su peligro con la velocidad endiablada de sus jugadores de banda, de su fuerza en el centro del campo y lo rocosos que son, por ello planteamos el partido a jugarles mucho por el suelo, a hacerles el partido incómodo, a tirarles la línea de presión muy arriba para evitar los pelotazos a las bandas, teníamos preparadas las coberturas defensivas de los centrales para hacerle dos contra uno a sus veloces extremos, pero casi nada nos salió bien.
Fue el típico partido de desacierto general, el típico día que no se da una a derechas, se puso toda la voluntad del mundo, pero el desequilibrio que tenemos en mediocampo donde nos falta un jugador específico que reste, (hoy incluso ese puesto lo ocupó un David Martín, un infantil), fue un lastre que nos hizo no dominar por completo el ritmo de juego, nunca tuvimos constancia en las llegadas.
La verdad es que visto lo visto en los 90 minutos, el resultado no puede catalogarse como justo, el primer tiempo se jugó practicamente en su campo, tuvimos alguna que otra ocasión clara, tiramos alrededor de 10-12 saques de esquina, pero todo fue en vano, y ellos no tiraron ni una sóla vez a portería, tan sólo centros al área sin peligro.
Digamos que teníamos la situación controlada, a poco que mejorásemos la espesura en ataque podríamos tener serias opciones de adelantarnos en el marcador y de llevarnos el partido, para ello modificamos el dibujo con respecto al segundo tiempo, buscábamos tener superioridad numérica en el centro, pero en su primera llegada con cierto peligro nos rematan una jugada a balón parado y se adelantan en el marcador.
Fue un palo demasiado grande, y si encima a los dos minutos cuando estábamos empezando a recuperarnos del gol nos hacen el segundo, apaga y vámonos, ya no había nada que hacer, tan sólo hubo tiempo para que hicieran dos más, para que incomprensiblemente nos expulsaran a Diego y para que Julio, (que hizo un partido horrible, no le salió nada), metiera el gol del honor.
En resumidas cuentas, podemos decir que el plus de motivación por todo lo que se jugaba en el envite, (nosotros al fin y al cabo tan sólo nos jugábamos la honrilla), hizo que se llevaran el partido, y todo ello sin desmerecer la calidad de los chavales del Hinojos, un equipo muy bien armado, difícil de batir, al que quizás nos hemos enfrentado a ellos tanto en la ida como en la vuelta en un mal momento, pero los calendarios son así, y ellos han tenido la regularidad que nos ha faltado a nosotros, que hemos alternado fases de la temporada en la que éramos casi invencibles con otras en las que cualquiera nos ganaba, y así es imposible luchar por cotas mayores, por ello sólo nos queda felicitarlos por su temporada y trabajar para que en años venideros seamos nosotros los que lleguemos a las jornadas finales con serias opciones de salir campeón.
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