EL NUEVO SECRETARIO JUDICIAL

Creanme que desde que hace varios meses me comunicaron extraoficialmente que mi amigo Manolo Coronel iba a ser nombrado secretario judicial sabía que este tema iba a traer cola, dentro de mi grupo político no lo habíamos hablado siquiera, por eso que pedimos un receso en el pleno para debatir nuestra postura.

Es evidente que personalmente con Manolo me une una muy buena relación, puedo afirmar con rotundidad que a nivel personal no soy imparcial con él, no puedo serlo, hemos vivido mucho y muy bueno juntos y particularmente desde el primer momento hubo muy buena conexión entre ambos.

Nunca me ha importado tocar cualquier tema en conversación con él, a pesar de sus posturas radicalizadas muy contrarias a las mías, digamos que "me va la marcha" y con Manolo es fácil el tener una conversación intensa.

El manifestar públicamente una postura tan contraria a ciertos sectores de la población como ha manifestado por activa y por pasiva Manolo desde siempre, y en especial desde que desde la red se pueden hacer públicas las opiniones, hace que cara a todo el pueblo haya perdido algo tan inherente a un puesto como el de secretario judicial como es la imparcialidad.

Igualmente el estar enfrentado a alguna que otra persona, más de las necesarias, precisamente por su forma de ser y entender la vida, y a lo mejor en algunos casos por culpa de los demás, también pone en el candelero su ideoneidad para el puesto.

Tampoco hemos de obviar que en tiempos en los que el paro está haciendo estragos, tiempos en los que vemos como hay familias enteras sin ingresos ni recursos y el sacar un puesto, aunque sea a tiempo parcial, y asignarlo a dedo a una persona funcionaria, con ingresos garantizados, también pone en cuestión que Manolo sea el candidato perfecto para ocupar el cargo.

Esas fueron las razones por las que el grupo popular votó en contra en el pasado pleno, motivos más que de peso para justificar el voto negativo.

Particularmente deseo a Manolo ,como amigo mío que es, lo mejor, y si para él es bueno un extra de ingresos por supuesto que a nivel personal me alegra, pero como cargo público tengo la obligación de mirar por los intereses generales, por los de mis amigos y por los de los que no lo son, y mirando las cosas con objetividad no podía defender otra postura que la que mi grupo adoptó votando en contra del nombramiento.

Tengo que reconocer también que me duele leer las barbaridades que de él se están escribiendo por los distintos blogs bonariegos, me parece que el reproche que se pueda hacer a su designación debe ir destinado a quién lo contrata, no a él mismo, y se está utilizando su imagen personal para atacar al equipo de gobierno.

Pero hay una cuestión, a mi juicio muy importante, que ha sido pasada por alto por todos, y son las formas con las que hemos afrontado el tema desde el grupo popular, no hay forma más respetuosa y más sutil de oponerse a la asignación a dedo de un cargo que como nosotros lo hemos hecho, y ahí está el acta de la sesión para comprobarlo, de hecho hay quién nos ha reprochado nuestras "buenas formas" a la hora de manifestarnos en el caso.

Manolo aparte de un acoso y derribo a todo lo que tenga algo que ver con el Partido Popular, aparte de un ataque contínuo a los cargos del partido a todos los niveles, cometió el tremendo error de mandar mensajes a la web del partido una vez acabadas las elecciones municipales burlándose por los resultados y en un tono nada respetuoso.

Incluso a mí mismo me mando algún email en ese sentido, cosa que le recriminé y quedamos para una conversación que desgraciadamente nunca se produjo, por no hablar de los ataques continuos rayando la persecución a mi compañera María Jesús ,y lo curioso del tema es que a nivel personal él tiene una buena relación con casi todos los miembros del partido, que también hay que decirlo, su guerra es al partido, a las siglas y todo lo que tenga que ver con ellas.

Con todos esos antecedentes, el que ahora lo coloquen a dedo para un cargo nos lo ponía como vulgarmente se dice "a huevo" para que públicamente lo hubiésemos masacrado, para que no se hubiesen cuidado las formas, para torpedear su nombramiento, y quizás con muchos argumentos para un lapidamiento público.

Pero ahí están los hechos, ahí están las palabras que se han usado, el grupo ha demostrado que ese odio no es recíproco, siempre digo que es muy triste ser anti algo, y nunca hemos mirado a Manolo como un enemigo por más que él mismo se empeñara en serlo, nunca entramos al trapo, ni tan siquiera cuando la vida nos lo ha puesto en bandeja de plata para hacerlo, hemos demostrado, aunque esté mal que sea yo mismo quién lo diga, mucha categoría moral y hemos dado una lección de talante democrático.

Lo fácil hubiese sido el comenzar una campaña de descrédito a Manolo y de forma subsidiaria al equipo de gobierno socialista, y no lo hemos hecho por la sencilla razón que no nos sale de dentro, inconscientemente hemos entendido todos los que formamos el comité local del partido que es más importante en este caso el dar una lección de civismo con una inacción que el pasar al ataque, entre otras cosas porque habrán más batallas, muchas más.